En momentos de enfermedad y dificultad, encontrar consuelo en la Palabra de Dios puede ser una fuente de fortaleza y esperanza. A lo largo de la Biblia, encontramos versículos llenos de aliento que nos recuerdan el amor y el cuidado de Dios, y nos invitan a confiar en Su poder sanador. En esta colección de 50 versículos bíblicos de aliento para un enfermo, encontrarás palabras de consuelo, fortaleza y fe que pueden ser un bálsamo para el corazón y el espíritu en tiempos de enfermedad.

  1. «No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te fortalezco; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.» – Isaías 41:10
  2. «El Señor está cerca de los quebrantados de corazón, y salva a los contritos de espíritu.» – Salmos 34:18
  3. «Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.» – Mateo 11:28
  4. «Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.» – Isaías 53:5
  5. «Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido.» – Isaías 53:4
  6. «Porque yo, el Señor tu Dios, te sostengo de tu mano derecha; te digo: ‘No temas, yo te ayudo.’» – Isaías 41:13
  7. «Jehová el Señor es mi fortaleza, y él hizo mis pies como de ciervas, y en mis alturas me hace andar.» – Habacuc 3:19
  8. «Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?» – Salmos 27:1
  9. «Bienaventurado el hombre que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.» – Santiago 1:12
  10. «El Señor te guardará de todo mal; él guardará tu alma. El Señor guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre.» – Salmos 121:7-8
  11. «Y el Dios de toda gracia, que llamó a su gloria eterna en Cristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca.» – 1 Pedro 5:10
  12. «Pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.» – Isaías 40:31
  13. «Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.» – Jeremías 29:11
  14. «Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará.» – Salmos 23:1-2
  15. «Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.» – Salmos 46:1
  16. «Yo les daré sanidad, y los curaré; y les revelaré abundancia de paz y de verdad.» – Jeremías 33:6
  17. «Mas para vosotros, los que teméis mi nombre, nacerá el sol de justicia, y en sus alas traerá salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada.» – Malaquías 4:2
  18. «Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas le librará Jehová.» – Salmos 34:19
  19. «Alégrate en la esperanza; sufre en la tribulación; persevera en la oración.» – Romanos 12:12
  20. «Jehová sustentará en el lecho de dolor; mitigará en sus enfermedades.» – Salmos 41:3
  21. «Mi carne y mi corazón desfallecen; mas la roca de mi corazón y mi porción es Dios para siempre.» – Salmos 73:26
  22. «¿Por qué te abates, oh alma mía, y te turbas dentro de mí? Espera en Dios, porque aún he de alabarle, salvación mía y Dios mío.» – Salmos 42:11
  23. «El Señor es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? El Señor es la fortaleza de mi vida; ¿quién podrá amedrentarme?» – Salmos 27:1
  24. «Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu.» – Salmos 34:18
  25. «Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación.» – Mateo 5:4
  26. «No os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.» – Mateo 6:34
  27. «Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo.» – Romanos 15:13
  28. «Pero Él fue herido por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre Él, y por su llaga fuimos nosotros curados.» – Isaías 53:5
  29. «¿No te lo he mandado yo? ¡Esfuérzate y sé valiente! No temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.» – Josué 1:9
  30. «Ciertamente llevará él nuestras enfermedades y sufrirá nuestros dolores, pero nosotros lo consideraremos herido, golpeado por Dios y humillado.» – Isaías 53:4
  31. «Jehová guarda a todos los que le aman, mas destruirá a todos los impíos.» – Salmos 145:20
  32. «Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día.» – 2 Corintios 4:16
  33. «Jehová es tu guardador; Jehová es tu sombra a tu mano derecha. El sol no te fatigará de día, ni la luna de noche.» – Salmos 121:5-6
  34. «Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.» – Romanos 8:28
  35. «Jehová redimirá a mi alma de la mano del Seol, porque él me tomará consigo.» – Salmos 49:15
  36. «Y si clamare a mí, yo le responderé; yo estaré con él en la angustia; lo libraré y le glorificaré.» – Salmos 91:15
  37. «El Señor está conmigo; no temeré lo que pueda hacerme el hombre.» – Salmo 118:6
  38. «Él sana a los quebrantados de corazón, y venda sus heridas.» – Salmos 147:3
  39. «Pero yo te cantaré, fortaleza mía, y alabaré de mañana tu misericordia; porque has sido mi amparo y refugio en el día de mi angustia.» – Salmos 59:16
  40. «El afligido y necesitado busca aguas, y no las hay; seca está de sed su lengua. Pero yo, Jehová, los oiré; yo, el Dios de Israel, no los desampararé.» – Isaías 41:17
  41. «Venid a mí todos los que estáis cansados y cargados, y yo os haré descansar.» – Mateo 11:28
  42. «Ciertamente él cargó con nuestras enfermedades y soportó nuestros dolores.» – Isaías 53:4
  43. «Él sana a los quebrantados de corazón y venda sus heridas.» – Salmos 147:3
  44. «No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te fortalezco.» – Isaías 41:10
  45. «Jehová, Dios tuyo, está en medio de ti, poderoso, él salvará; se gozará sobre ti con alegría, callará de amor, se regocijará sobre ti con cánticos.» – Sofonías 3:17
  46. «Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.» – Jeremías 29:11
  47. «Cierto, Dios es mi salvación; confiaré y no temeré, porque mi fuerza y mi canción es el Señor Dios, y él ha sido mi salvación.» – Isaías 12:2
  48. «Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.» – Salmos 46:1
  49. «El Señor te guardará de todo mal; él guardará tu alma.» – Salmos 121:7
  50. «Porque yo soy Jehová tu Dios, el que te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo.» – Isaías 41:13

Estos versículos, entre muchos otros que se encuentran en las Sagradas Escrituras, nos recuerdan el amor incondicional de Dios y Su promesa de estar siempre a nuestro lado, especialmente en los momentos de enfermedad y debilidad. Al meditar en estas palabras de aliento y fe, podemos encontrar consuelo, fortaleza y renovación en nuestra fe en Dios. Que estos versículos bíblicos de aliento para un enfermo sean una fuente de paz y esperanza en medio de las dificultades, recordándonos que en Dios encontramos el verdadero consuelo y sanidad para nuestras vidas.

Por José Antonio

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